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martes, 27 de diciembre de 2011

Orquestas

BANDAS SONORAS


Los burros de carga, podemos con todo.


Transcurren los días en una ciudad y es más que cierto que raro es el de estos en que no nos quejamos de algún aspecto que nos molesta, que lo echamos en falta o incluso que estimamos que modificándolo iría mejor para el conjunto de los ciudadanos. Nada más que echar la vista atrás o a los lados, veremos multitud de ejemplos. Sin duda a veces no los exponemos, otras se quedan en simples comentarios y la mayoría ni los conocemos. Ejemplo reciente y ya en un tamaño más que elevado, puede ser el perfecto Sistema Tranviario, ínclito orgullo del trabajo en conjunto de las administraciones y modelo de cómo algo tan complicado es necesario mantenerlo en un lento y minucioso estudio antes de ponerlo en marcha por los peligros que pudieran surgir. Tan solo Chapeau porque, una vez seremos el ejemplo de los ciudadanos del mundo. ¿O es que las Pirámides,  construcción que me parece más cercana al Sistema Tranviario, creen Vds., que fue terminarlas y ponerlas en marcha? Nada de eso, nada de eso, entre otras cosas tuvieron que aguardar a que falleciera algún faraón o similar  y merced a este modelo y a esta forma de proceder  ahí están, siglos y siglos y como nuevas y como ejemplo de buen gobierno. Pues algo similar puede ocurrir, en este Jaén, de nuestros amores, con una nueva idea que, al menos, se ha dado a conocer y que, personalmente estimo como de matrícula de honor. Me refiero, entre otras ideas que bullen entre los fríos ad hoc a la instalación de bandas sonoras. Desde luego instalar bandas sonoras en esta época invernal debe ser harto difícil y complicado, pero doctores han las iglesias y auténticos ejemplos de técnica los Ayuntamientos. Sin ir muy lejos y sin ahondar mucho, ahí está el milagro de la luz. A pesar de unas tremendas, por lo visto, deudas con la luz, parece ser que a quien corresponde dio: ¡”Fiat Lumen”!, se tradujo y la luz se hizo. Una luz al estilo de nuestra ciudad, pero no nos podemos quejar, mejor dicho no se pueden quejar las calles con categoría, las suyas, las de los de siempre. Los demás… ¿Para qué queremos la luz? Estamos mucho mejor a oscuras, no vemos nada y así es como no se sufre nada, os lo aseguro. Pues esto de la luz nos da una idea de por donde deben ir las bandas y la música que la marque el alcalde, que para eso manda. Yo, si mandara, pondría las bandas tendidas en el Paseo de la Estación del Generalísimo Franco,  en la Plaza de la Constitución de José Antonio, en La Carrera, en la calle Campanas, Muñoz Grandes, en fin en todas esas calles en las que las especiales circunstancias viarias permiten unas velocidades que hay que frenar. ¿Qué sonoridad? Muy fácil: Desde que te vi venir dije por burra vienes. ¿Qué es la burra? 

      BAROJA